La campaña de Multiópticas me ha hecho reflexionar
Mi hijo ya tiene 12 años y con el confinamiento el tiempo que pasa delante de la pantalla se ha incrementado de forma alarmante. Si ya se pasaba horas en su tiempo libre y le costaba desconectar, con las clases online el tiempo se disparó: por la mañana, el colegio, y por la tarde, su ocio, frente al ordenador, claro, jugando solo o con sus amigos, tan conectados como él.
No sé si es casualidad. O necesidad quizá, pero justo estos días se ha lanzado la campaña de Multiópticas que, bajo el concepto de Screen Pollution, ha lanzado SP Future, una línea de muebles infantiles que podrían ser perfectamente reales. ¿Qué te parece una cuna que incorpora pantallas para que el bebé esté entretenido o le calme cuando llega el momento de dormir? Un horror ¿verdad? Si no la has visto, ya te adelanto que es como ver un capítulo de Black Mirror, sobre una realidad distópica que hace que llegues a preguntarte en algún punto si lo que estás viendo es real.
Afortunadamente, es tan sólo una campaña, elaborada justamente para que recapacitemos sobre esto y para que reaccionemos. A veces nos olvidamos de que debemos cuidar nuestra salud ocular y la de nuestra familia. Esta campaña además, sí nos da datos que, lamentablemente, son reales y de los que, probablemente, no somos conscientes.
Contesta conmigo a estas preguntas
Los adultos…
Contesta conmigo a las siguientes preguntas (no hagas trampas ¿eh?)
¿Qué es lo primero que haces cuando te despiertas? ¿Y lo último? No sé tú, pero yo sí soy parte de ese 70% de la población que mira su móvil en estos casos.
¿Y cuando sales a comer o cenar con amigos o familia? ¿Dejas el móvil sobre la mesa? Pues entonces eres parte del 46% de españoles que mira su móvil en esas ocasiones. Aquí, he de decir, que me porto bien y ya lo dejo en el bolso.
¿Podemos pasar hasta 11 horas al día frente a una pantalla? Pues claro, y más, diría yo, entre el ordenador por trabajo, y la tableta o el móvil por ocio, yo creo que hay días que las supero. Pues según nos cuentan en los datos de esta campaña de Multiópticas el confinamiento ha incrementado esta cifra hasta las 14 horas diarias de media. No está mal ¿no?
Claro, con este ejemplo, no nos puede extrañar luego que nuestros hijos actúen igual y que cada vez nos cueste más separarles de ellas. Y que cuando lo hacen, es a regañadientes, porque no quieren ni salir.
Los niños…
¿A qué edad tuvo tu hijo su primer móvil? Parece ser que ahora empiezan a los 9 años. Mi hijo lo tuvo con 10, no se aleja mucho, la verdad.
Y la primera tableta, ese regalo de Navidad tan anhelado, la empiezan a pedir a los 7 años. ¿Te ha pasado?
Ojo, que yo no soy anti aparatos, creo que son beneficiosos en muchos aspectos de su educación, pero está claro que sí debemos restringir su uso, por salud física, sobre todo por su vista, y por su desarrollo intelectual.
Tanto adultos como niños…
Esto es importante: un 60% de españoles ha notado molestias en la vista durante el confinamiento. Es cierto que fijar la mirada tanto, en pantallas con luz, y además sin salir de casa, no ha sido lo mejor para mucha gente.
Hay que cuidar la salud de nuestros ojos y esta campaña de Screen Pollution de Multiópticas creo que está muy bien enfocada para hacernos reflexionar y concienciarnos de un uso responsable de las pantallas en nuestra vida.
Recomendaciones de la campaña de Multiópticas
Lo primero, es ser conscientes de que debemos frenar el uso, está claro. Mide el tiempo que pasas con ellas y redúcelo. Parece mentira la de tiempo de calidad que recuperamos cuando no estamos pendientes de móvil ¿verdad?
No estés pendiente de las notificaciones del móvil: puedes configurar un sonido para tus contactos prioritarios y quitar los demás. No seas esclavo del móvil.
Si estás frente al ordenador, descansa cada 45 minutos y mira al horizonte para que tus ojos se relajen.
Vigila la distancia, no te acerques mucho a las pantallas. Entre 35 y 50cm para el móvil o tableta y un mínimo de 55cm para una pantalla fija.
Si utilizas gafas, es bueno que añadas un filtro de luz azul.
Da ejemplo a tus hijos, y crea unas normas de uso que todos, pequeños y mayores, cumplan.
Y de vez en cuando, dedícate a un hobby que haga olvidar el móvil por un buen rato.